
no me gustan los planos inclinados, confirmé hoy pedaleando mi bicicleta. la maravilla física de que un plano inclinado permita aligerar cargas por arrastre, puede convertirse en un pequeño infierno para quien intente disfrutar un paseo en bici. ese despreciable ángulo que forma la superficie de partida con la horizontal, se vuelve una cuesta insoportable encima de una bicicleta. quince cuadras benditas son un camino del inca multiplicado.
claro que en este _plano la justicia es cuadrada: al esfuerzo del repecho sigue el alivio de la bajada. agradecidas las piernas por su minuto de gloria. pero ¿y yo? ¿y mi paseo?
denme horizontal, quiero geografía llana. cambio el gozo elemental de la velocidad por el placer de avanzar al ritmo de mis ganas. ni tan lento ni tan nada.
(después de rendirme en francisco muñoz y buxareo, una tarde de domingo de 2009)
claro que en este _plano la justicia es cuadrada: al esfuerzo del repecho sigue el alivio de la bajada. agradecidas las piernas por su minuto de gloria. pero ¿y yo? ¿y mi paseo?
denme horizontal, quiero geografía llana. cambio el gozo elemental de la velocidad por el placer de avanzar al ritmo de mis ganas. ni tan lento ni tan nada.
(después de rendirme en francisco muñoz y buxareo, una tarde de domingo de 2009)